Reseñas de TV- Gabriel

Hacía tiempo que no había una pieza televisiva de la trascendencia globática y extraterrenal (esto se explicará más adelante) de este melodrama protagonizado por nuestro Chayanne. Justo cuando pensabamos que las historias de vampiros estaban quemadas y gastadas, Mega TV nos trae justamente otra historia acerca de vampiros, pero con unas grandes particularidades que la diferencian de sus antecesoras. Para empezar, los vampiros hablan español. Hasta ahora, nos habían inducido a pensar que igual que los pañales se llaman Pampers, los vampiros, aún viniendo desde Transilvania, Rumania, hablaban todos inglés británico. Sin embargo, en Gabriel vemos que esta especie/grupo/género se ha expandido y no solo ha cambiado de continente, sino que también se adaptó a una nueva cultura y hoy es un latino híbrido indefinido más que habita las calles de South Beach. Otro detalle ganador de esta producción es su escogido del reparto, desde un Chayanne que suspira todas sus líneas (no que la gente suspira, que él suspira cuando habla), pasando por un José Luis Rodríguez "El Puma" que cada vez se sigue superando en su misión de envejecer sin ningún orgullo, y acabando por un Julián Gil que sigue rompiendo records en Guinnes, siendo el último el de la persona que estuvo por más tiempo consecutivo actuando mal.
Con este tema central de un vampiro latino híbrido, y ese reparto magistral, ya debería ser suficiente para declarar esta serie como un éxito, sin embargo su trama contiene también detalles de excelencia que merecen ser reseñados. Lo primero y más impactante es que el vampiro principal, Gabriel (Chayanne), está cumpliendo una penitencia voluntaria en la que no mordería a ningún humano para obtener sangre durante 300 años. De esta forma, el protagonista obtiene su sangre de un banco de sangre (en serio), y le llega a través de una tubería tipo auto banco directamente a un suero en una silla ubicada en su casa. Esto es genial, es un vampiro en un rehab auto impuesto.



Finalmente, para impedir que Gabriel logre su cometido y se una en la vida eterna a su amada, está el Puma en su versión más vampiresca. Él intentará detenerlo usando todos los clichés, frases rebuscadas y matones a su alcance, pero siempre sin despeinarse.



En fin, si las series/novelas pudiesen ser nominadas para los óscares, esta sin duda no sería nominada, pero dada su trascendencia global y extraterrenal, es altamente recomendada para todos aquellos que los domingos a las 9 no tengan nada que hacer y en su TV solo se vea ese canal.